“Silencio y Palabra: Camino de evangelización”

 

Este domingo, 20 de mayo, se celebrará la 46º (cuadragésima sexta) Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales con la temática “Silencio y Palabra: Camino a la evangelización”.

El Santo Padre señala que “cuando palabra y silencio se excluyen mutuamente, la comunicación se deteriora…el silencio es parte integrante de la comunicación y sin él no existen palabras”.

Estamos rodeados de estímulos, señales, avisos y sonidos que intentan decirnos algo pero que juntos se atropellan y causan ruido. El bullicio es característico de ciertos espacios y lugares, solo que ahora contamina todo el ambiente.  En estos escenarios ¿Podemos escuchar algo? ¿Nos comunicamos?

Internet supone un camino a la información, pero así como hay posibilidades existen distracciones.  La redes sociales nos acercan a los hechos, nos ayudan con datos y opiniones. Hay un afán de proporcionar elementos para el análisis, sin embargo queda en las manos de cada persona vivir una auténtica comunicación.

La comunicación no solo son las palabras, es  también “la gestualidad, la expresión del rostro, el cuerpo como signos que manifiestan a la persona”. Para valorar esta dimensión hay que dejar espacio y condiciones para escuchar al otro en sus formas, en su integralidad.

Hemos sido prolíficos en avisar, en utilizar casi todos los espacios sociales para decir los intereses de ciertos grupos. Derivamos el hecho de comunicar en publicitar.  Pero no todo es mercado.

Parece necesario detenernos un momento, apagar los aparatos y escucharnos. ¿A dónde voy? ¿Qué me dicen la familia y los amigos?  ¿Qué construyo? ¿Cómo trasciendo? ¿Qué dejó en mi camino que ayude a los demás?

Al escucharnos también podemos dialogar con Dios, “el hombre igualmente descubre en el silencio la posibilidad de hablar con Dios y de Dios” así encontraremos respuestas a varias inquietudes que no por dejarlas han sido contestadas.  El bienestar, la salud, la armonía, la paz son grandes temas que necesitan respuestas efectivas.  Hay análisis doctos sobre qué alternativas tomar para llegar a una mejor calidad de vida. Grupos de especialistas nos prescriben modelos de acción que aún no logran el desarrollo global. ¿No será que falta un autentico diálogo en el que todos aportemos?

Pero este autentico diálogo no sólo será escuchar al otro y pugnar por prevalecer nuestras ideas.  Tal vez sea necesario empezar por escucharnos y en silencio descubrir que nos dicen las personas o que quieren decirnos porque probablemente el exceso de medios de comunicación terminó por atrofiar la capacidad de expresión o restringió la palabra a fórmulas y protocolos que acabaron anulando la riqueza de la lengua.

La 46ª Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales nos plantea un reto para avanzar en la evaluación de nuestra comunicación en sociedad.  No siempre decir más es expresar de mejor forma las ideas.